Prácticamente un mes después de que el nombre de Ángel Montoro fuese vinculado al Real Oviedo en modo de adelanto por cazurreando.com el futbolista valenciano sella su vínculo con el conjunto azul. Con la defensa y la delantera completa de efectivos necesarios, era el centro del campo lo que necesitaba ser ampliado. Ese perfil de mediocentro con capacidad de manejar al equipo en doble vía era el objeto de deseo tanto de la dirección deportiva como del cuerpo técnico. Tras esa espera del largo julio era El Comercio el que confirmaba el avance definitivo.
Con la llegada de Montoro, la octava en esta pretemporada, se cubre esa parcela con un futbolista muy experimentado y de plenas garantías, siempre que resista el envite contra las lesiones musculares que ha venido padeciendo en los últimos tiempos, y que en gran medida han supuesto su salida del Granada.
Se trata de un mediocentro de 1,80 metros, de 34 años y una dilatada carrera que le ha llevado en Primera División con el Valencia, Las Palmas y Granada. Precisamente es en el conjunto nazarí en el que más éxitos ha cosechado, con un soberbio paso por la Europa League en 2021, donde fue protagonista especial bajo las órdenes de Diego Martínez.
Las lesiones y distintas molestias físicas han impedido a Montoro tener un mayor impacto a nivel deportivo y una continuidad, como nos confirma Rafael Lamelas, periodista de El Ideal. Cuenta Lamelas que “el principal problema ha sido la fragilidad en su carrera, sobre todo cuando estaba en Primera División, pero aquí en Granada se le concediera un mito. Es uno de los miembros significativos del equipo que jugó en Europa. Aquí es muy querido. El último año ha tenido muchos problemas con las lesiones y por eso no ha continuado en el club. En otras circunstancias estaría aquí”.
Para Rafael Lamelas “es un jugador de máxima calidad. Si no hubiera tenido tantos problemas con las lesiones Ángel Montoro habría jugado en uno de los equipos importantes del fútbol español en mi opinión. Jugador con una gran capacidad de distribución del balón, desplazamiento, liderazgo, capacidad de recuperación defensiva. La verdad es que lo tiene todo”.
Jon Pérez Bolo va a emplear distintos esquemas en los que encajará el futbolista valenciano. “Es un organizador. Puede jugar en el pivote siendo el 8, o en un mediocampo de tres puede ser uno de los volantes. Incluso puede jugar de pivote único, como así ha hecho en Granada. Sobre todo se caracteriza por su capacidad de distribución. Tiene mucha calidad en el pase, un desplazamiento en largo impresionante, salvando las distancias parecido al de Xabi Alonso con esas aperturas a banda que hacía, y tiene llegada también. De vez en cuando hace algún gol, de hecho uno de los goles más importantes de la historia del Granada lo hizo él en Nápoles en la Europa League hace dos años. Metió un gol de cabeza”.
La gran pregunta que se han venido haciendo tanto en los despachos del Tartiere como en otras direcciones deportivas radica en su estado físico, aunque se valora su gran valor en el verde. Lamelas lo tiene claro. “Cuando está en condiciones es un jugador diferencial, para Segunda División especialmente. La incógnita es esa. Si no, no estaría en Segunda”.
También desde Granada el periodista Ricardo Contreras define a Montoro como «un jugador con muy buen toque de balón. Indiscutible en la etapa de Diego Martínez. Últimamente ha perdido mucho peso por el tema de las lesiones. Un centrocampista con llegada, que no muy goleador. Tiene un golpeo de balón exquisito».
Distintos gestores deportivos consultados se refieren tanto a la calidad técnica como a sus cualidades personales, siendo importante a la hora de generar buen ambiente en el vestuario.
Montoro apunta lógicamente a la titularidad en una zona en la que se cuenta con Luismi, Jimmy o Javi Mier. En la pretemporada Bolo ha querido probar a Hugo Rama en esa demarcación, aunque el puesto natural del gallego se ubica unos metros por delante.
