El comienzo del mercado veraniego ha traído una pequeña sorpresa a las oficinas del Tartiere. Con la mira en otros puestos, Tito Blanco se ve obligado a echarle un pulso a la ventana de fichajes para una doble incorporación en el lateral izquierdo ante la marcha de Pierre Cornud y la finalización de contrato de Mossa. Cornud, con un año más de vinculación en la entidad azul, decidía seguir el instinto de sus agentes para cambiar de aires.
Con 25 años y apenas dos temporadas en el fútbol profesional se considera que el lateral está preparado para dar el salto a una categoría superior, aunque sea en otra liga y en país lejano. Destacó en el Vetusta antes de dar la espantada y terminar apareciendo algo más tarde en el Sabadell, visto como un jugador de gran proyección. A pulir sus prestaciones defensivas. Rubén Reyes estuvo rápido para firmar a un futbolista de buen pie y precio.
En sus primeros partidos la presión de jugar en un equipo con exigencia pudo pasarle factura, y con el paso de las jornadas y la tranquilidad que le daba su condición de titular junto con los consejos de Ziganda pudo crecer. Su apagón en ciertas fases se fue disolviendo en un trabajo eficiente de ida y vuelta, y se valoraba muy positivamente su capacidad para centrar tanto en juego como en pelota parada. Destacado en la fase de mayor ebullición del equipo, también se vio perjudicado por una serie de lesiones que penalizaron su continuidad.
Aun con todo, ha superado los 2.400 minutos en un equipo que aspiró a luchar por el playoff. Y entonces aparecieron los pretendientes. Y las equivocaciones. Porque es perfectamente entendible que un jugador quiera mejorar ostensiblemente su situación económica. Pero también hay que cuidar los detalles. Se filtraba una foto en una cuenta anónima en una red social en la que se veía a Cornud pasando el reconocimiento médico con el Maccabi Haifa, su futuro destino si el dios del fútbol no decide devolver el boomerang. Foto aireada sin consentimiento del equipo que le sigue pagando y que no ha recibido cantidad alguna por traspaso.
También se ha sabido, información de La Nueva España, que Cornud habría amenazado con no presentarse el primer día fijado de entrenamiento si no se le facilitaba la salida. Posición sabida de fuerza para quien no quiere seguir. Hay que decir que en este proceso se podría pasar el algodón y saldría sucio. Han aparecido otros clubes supuestamente interesados en el francés, como el Auxerre o el Werner Bremen, algo que no parece demasiado verosímil teniendo en cuenta el nombre y experiencia del lateral. Suena a maniobra para fortalecer el caché.
No hay duda de que es una buena oportunidad en un equipo fuerte en su país, que es aspirante a competir en Europa, argumento de por sí sólido para darle una pensada. Sigo manteniendo que una temporada en un club como el Oviedo, con su ecosistema mediático y competitivo, podría haber sido lo ideal para su crecimiento, y para pulir los puntos débiles.